HALLOWEEN, LA FIESTA DE LOS DRUIDAS


Los animales eran venerados como tótems de la tribu y se buscaba la adivinación en el vuelo de los pájaros o en las entrañas de los animales sacrificados. Habitualmente celebraran sus rituales en bosques de robles.

2. Fin de año Celta
La noche del 31 de octubre, víspera del primero de noviembre los celtas celebraban el inicio del nuevo año y el final del verano, dado que el año se dividía en sólo dos estaciones, la de invierno y la de verano. La sociedad celta, que tenía una base rural centrada en la agricultura y el pastoreo, daba a esta fecha una gran importancia porque era el momento del año en el que sus vidas cambiaban radicalmente. El ganado bajaba de las colinas donde había estado pastando durante el verano y la gente se resguardaba en sus casas durante las largas noches de invierno dedicándose a contar historias y a realizar artes manuales. Esa noche también era propicia para examinar los presagios del futuro.

Para celebrar este momento los Druidas encendían grandes fogatas y dedicaban la noche a Samhain, el caballero de la muerte. Se sacrificaban animales con el fin de aprovisionarse para el invierno y, aparentemente, con el fin de protegerse de los malos espíritus ya que los celtas también creían que los espíritus de la muerte regresaban a sus moradas terrenales durante esa noche a pedir alimentos a los habitantes a quienes maldecían y hacían víctimas de sus conjuros si no accedían a sus peticiones. Tal vez de esta creencia surge posteriormente la frase "o me das algo o te hago una travesura" que es la traducción de "trick or treat", (también truco o trato) y es cuando los niños van de casa en casa pidiendo golosinas y amenazando (inocentemente) con hacer una travesura si sus deseos no son satisfechos.

Durante la celebración de la noche del 31 de octubre el sentimiento de proximidad con los difuntos era tal que cualquier ser vivo podía descender al mundo inferior para comunicarse con ellos en una especie de confusión cósmica, lo que ha dado lugar al nacimiento de una multitud de leyendas al respecto. Durante esta noche los muertos podían estar entre los vivos, era el tiempo cuando el velo entre los mundos estaba más delgado y los vivos podían también comunicarse con sus seres queridos ya fallecidos.

3. Un poco de historia
Con el paso del tiempo a esta celebración celta se le fueron añadiendo algunos adosados, tal es el caso de la costumbre de disfrazarse durante esa noche y utilizar calabazas huecas con una vela encendida en su interior. Hay quien afirma que la costumbre de disfrazarse durante esa noche tiene su origen en la Edad Media cuando algunos bandoleros se aprovecharon de estas creencias y después de cometer sus fechorías culpaban a los espíritus y se disfrazaban de diablos y espantos para hacer más creíble su cuento.

Calabazas luminosas
La costumbre tan extendida de utilizar calabazas cortadas en forma de caras grotescas e iluminadas con velas por dentro parece que tiene su origen en los juegos de los niños irlandeses quienes usaban papas y nabos para tal fin. El nombre de estas calabazas jack-o'-lantern arranca en la leyenda de un borracho llamado Jack, quien con trucos logró que el diablo le prometiera no volver a perseguir su alma. Según la leyenda, al morir no lo dejaron entrar en el cielo por tacaño y sediento, así que tuvo que irse al infierno y el diablo lo condenó a vagar por el mundo hasta el día del Juicio Final. El diablo le tiró un carbón encendido para que pudiera ver en la oscuridad y Jack lo puso dentro de un nabo que se había estado comiendo.

La romanización
Cuando los romanos conquistaron los territorios dominados por las tribus celtas, especialmente en Escocia e Irlanda, añadieron a estas fiestas el festival romano de la cosecha que realizaban el 1 de noviembre en honor a Pomona, diosa de los árboles frutales, cambiando su celebración para el 31 de octubre. Las manzanas empezaron a formar parte de las celebraciones. Tal vez de aquí vienen las prácticas de adivinación asociadas con esta estación que posteriormente se convirtieron en simples juegos. Por ejemplo la primera persona que pescase una manzana en un recipiente con agua sería la primera en casarse en el nuevo año o la longitud de la peladura de la manzana representaba la duración que iba a tener la vida.

Entre el 2000 y 1700 a. J.C. las tribus celtas se extendieron por lo que ahora conocemos como Gran Bretaña y Francia. Los primeros colonos ingleses e irlandeses que emigraron a América llevaron con ellos sus costumbres y tradiciones a su nueva patria, entre ellas la festividad del día 31 de octubre. Aunque parezca lo contrario, el Halloween no es una fiesta genuina de los Estados Unidos. La conmemoración de esta fecha comenzó a festejarse en pequeñas comunidades de irlandeses a mediados del siglo XIX.

Una fiesta internacional
La internacionalización de Halloween se produjo en los años 80 y actualmente es una de las fechas más importantes del calendario festivo estadounidense y canadiense, aunque en la actualidad esta fiesta se ha extendido a numerosos países ajenos a las costumbres anglosajonas. Hoy la celebración de la fiesta de Halloween carece de todo sentido religioso y su origen es prácticamente ignorado por la mayoría y, desde luego, nada tiene que ver con los rituales de los druidas ni con los pueblos celtas que dominaban la mayor parte del oeste y centro de Europa durante el I milenio a.C.

Halloween se ha convertido en un motivo más de lucro comercial dado que muchos establecimientos nos ofrecen para esa noche un lote completo con todo lo necesario (disfraz, calabaza, dulces, velas, etc.) para disfrutar de la velada. Además la industria cinematográfica, tan aficionada a la explotación disparatada de cualquier acontecimiento ha convertido la noche de Halloween en sinónimo de muerte, asesinato y destrucción, contaminando con sus descabelladas versiones los ritos ancestrales de nuestros antepasados.

6. Halloween en el mundo

En todas las culturas existe el día de "Todos los Santos" y También del día de Difuntos" . Ya que en las culturas relacionadas con la tierra la muerte es vista como continuidad, permanencia y renovación. Todos la llevamos con nosotros, es nuestra compañera de viaje, nos alerta ante el peligro recordándonos a cada momento nuestra naturaleza mortal y limitada.

Se considera la muerte como el cambio de ciclo y la renovación, siempre es nuestra compañera de viaje y nos alerta de los peligros en nuestra vida actual.

Los aztecas en el mes de noviembre también celebraban la fiesta de los muertos, dedicada a MICCAILHUITTONITLI, con rituales en los templos en los que se ofrecen mazorcas de maíz, flores, encendiendo copal para preparar a los celebrantes en la conexión con el otro mundo, el de los dioses, con quienes residían los espíritus de los difuntos y para que ayudasen a sus seres queridos.

Para los mayas, El Hanal Pixan es la celebración en la que se mantiene el vínculo entre vivos y muertos a través de rituales con ofrendas de comida y bebida a las ánimas de los difuntos.

Para la cultura Yakateca todo es vida y la muerte es parte de ella. No es el final, es el inicio perpetuo.

La muerte nos precede y sucede; sin la muerte de nuestros antepasados no tendríamos vida.

También tenían ritos similares los teotihuacanos, toltecas, nahuas, huaxtecos, totonacas, otomíes, purechas, mixtecos, zapotecas, etc.

A mediados del siglo XVIII, los emigrantes llegan a América del Norte. Con ellos llegan su cultura, su folclore, sus tradiciones, su Halloween. En ese momento Halloween sufre una fuerte represión por parte de las autoridades. Pero a finales del siglo XIX, con una nueva oleada de inmigrantes de origen céltico, la fiesta de Halloween, se mezcla con otras creencias indias formándose lo que conocemos hoy como la fiesta de Halloween donde se empiezan a contar historias de fantasmas , hacer travesuras, los bailes tradicionales y la confección de trajes para la fecha.

La fiesta del Día de los Muertos, no tiene más semejanza con la de los fieles difuntos europea actual, en la que es un día para a honrar a los difuntos queridos.

Ancestralmente es el momento en el que la línea con el otro mundo es más delgada y la comunicación entre ambos resulta más fácil, de ahí la importancia de hacer un ritual para que nuestros antepasados nos ayuden a conseguir nuestros fines.

En los rituales deberán de estar presentes la luz, los buenos recuerdos y una simbología adecuada para dar gracias de antemano por la ayuda que vamos a recibir.